El café turco puede resultar muy exótico para aquellos quienes nunca lo han visto ni probado antes, pero lo cierto es que este método de preparación del café se lleva a cabo en la mayoría de países de Oriente Medio. Para preparar un café turco necesitarás pues un cezve o ibrik, un recipiente de latón con un mango, dentro del que hervir el café. Si quieres conocer los pasos a seguir, en unCOMO te explicamos cómo hacer un café turco.
- Cezve
- Tazas pequeñas
Lo primero que debes saber es que para hacer café turco se necesita un cezve, una jarra de cobre y latón con un largo mango típica de los países de Oriente Medio. Es en este pequeño recipiente donde se preparan uno por uno los cafés.
Asimismo, deberás asegurarte de que el café que vas a usar esté muy molido, es decir, que se trate de café molido extrafino para preparar un buen café turco.
Lo primero que se debe hacer será medir el agua con la taza que vamos a usar después para tomar el café -una taza por cada café- y echarla dentro del cezve, junto con una cucharada rasa de café bien molido. Ponemos el cezve a fuego medio para llevarlo a ebullición y añadimos entonces azúcar al gusto.
En el momento en que parece que va a empezar a hervir el agua con café dentro del cezve, retiramos del fuego y repartimos la espuma resultante en las distintas tazas. A continuación, volvemos a poner el cezve a fuego bajo para que vuelva a hervir.
Antes de servir el café turco, añadimos una cucharada de agua bien fría en las tazas para así asentar la borra en el fondo. Seguidamente, ya podrás verter el café del cezve a la taza sin filtrarlo.
Es importante saber que el poso del café turco que queda al fondo de la taza no debe tomarse, sino que es necesario parar de beber al notar que llegamos a la borra.
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