Cómo hacer pulpa de tamarindo

Cómo hacer pulpa de tamarindo

El tamarindo es un árbol leguminoso que crece en las zonas tropicales, el cual tiene una vaina rígida que contiene pulpa, huesos y hebras. Además, se caracteriza por su sabor ácido-dulce que resulta más ácido antes de madurar, y mucho más dulce una vez maduro. Este fruto posee muchas propiedades y, por eso, se aprecia mucho en la gastronomía, la medicina alternativa y hasta la industria textil.

Si se trata de nutrientes, el tamarindo se considera un multivitamínico gracias a su variedad de compuestos, entre los cuales destacan: ácido tartárico, ácido cítrico, azucares, fibra, pectina, magnesio, fósforo, calcio; así como las vitaminas A, B3, C. Por esta razón, también se le considera un remedio casero muy eficiente para afecciones menores tales como dolores de cabeza, gripes, tos, hemorroides, estreñimiento, síntomas de resaca, deshidratación leve, problemas de digestión, tos y fiebre.

En la gastronomía, su pulpa se emplea mucho en la cocina latina y asiática, formando parte de recetas sublimes, sean dulces o saladas. Pensando en todo lo antes dicho, en unCOMO queremos compartir contigo cómo hacer pulpa de tamarindo, una receta fácil que aprovecharás de muchas formas, ¡y para la que solo necesitas 3 ingredientes!

4 comensales 45 minutos Dificultad baja
Ingredientes:
Pasos a seguir:
1

Pela los tamarindos. Quítales las cáscaras muy bien, pues si caen en la preparación, tienden a amargar la pulpa de tamarindo. Elimina también las fibras que la acompañan, pues tienen una consistencia dura, poco apetecible.

2

Limpia los tamarindos. Vierte agua a temperatura ambiente dentro de un bol y sumérgelos. Frótalos un poco con los dedos hasta retirar cualquier menudencia. Escúrrelos y colócalos sobre papel absorbente antes de hacer la pulpa de tamarindo fácil.

3

Ponlos a hervir durante mínimo 30 minutos. En una cazuela agrega el agua, el tamarindo y el azúcar. Mezcla muy bien todo los ingredientes y, después, mueve de vez en vez sin descuidar la preparación. La idea consiste en lograr separar las semillas de la pulpa durante el proceso. Pasado el tiempo, deja reposar la pulpa de tamarindo hasta que se enfríe.

4

Deposita la pulpa en un bol amplio y profundo. Remuévela y tritúrala ayudándote con un batidor de globo, es decir, remueve y aplasta. Así, hidratas las fibras que aún queden por allí, permitiéndote luego eliminarlas con facilidad.

5

Retira los huesos o semillas de la pulpa. Asimismo, retira cualquier otra menudencia que haya quedado: fibra, trocitos de la cáscara, partes duras, etc. Hacer pulpa de tamarindo resulta muy sencillo, el único paso laborioso es este.

6

Vierte la preparación en la licuadora. Tritura la pulpa de tamarindo por un par de segundos si quieres que sea consistente. En cambio, si te interesa que sea más líquida, procésala un poco más, ¡listo!

7

Hacer pulpa de tamarindo resulta muy provechoso en la cocina, pues gracias a su sabor ácido-dulce, puedes transformar casi cualquier platillo cotidiano en una verdadera delicatez. Para darle buena utilidad a este alimento, necesitas conocer un poco en qué tipo de preparaciones funciona bien y cómo combinarlo. Por eso, a continuación compartimos contigo algunas sugerencias:

  • Dulces: aunque en la dulcería criolla latinoamericana hay varios países que elaboran postres a base de tamarindo, en México tienen especial importancia, pues el dulce de tamarindo se comercializa tanto a nivel artesanal como industrial. La receta más popular a nivel comercial es tamarindo enchilado, y existen muchas presentaciones distintas: tarugos, medallones, paletas, cucharitas, tamborcitos, ollitas, banderillas, entre otros.
  • Bebidas: en México resultan especialmente populares las bebidas preparadas con este fruto, por eso puedes encontrarlo como base de agua frescas, chamoyadas, atoles, té, zumos y hasta bebidas alcohólicas (micheladas, vodka y otras). Puedes usar la pulpa de tamarindo para micheladas.
  • Mermeladas, salsas y aliños: puedes aprovechar el sabor agridulce de una salsa de tamarindo para enriquecer carnes de todo tipo y otros alimentos. En la gastronomía mexicana, suele combinarse con picante, usando diferente tipos de chiles como chipotle, chile de árbol y habanero, etc. Una salsa muy popular en la comida mexicana es el chamoy, cuya fruta deshidratada principal es el tamarindo. De esta forma, puedes usar la pulpa de tamarindo para hacer manzanas con chamoy, por ejemplo.
  • Aderezos y vinagretas: el toque agridulce del tamarindo, le da vida a cualquier ensalada, convirtiéndola en un platillo gourmet.

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Consejos
  • La pulpa del tamarindo también sirve para preparar gelatina de tamarindo con chamoy y raspados.