Cómo hacer mousse de yogur
Si te encantan los postres pero crees que son demasiados pesados y tiendes a evitarlos debes saber que hay una gran variedad de postres ligeros aptos para cualquier dieta equilibrada y saludable. Es el caso del mousse de yogur, el cual, además de tener una cantidad baja de calorías, nos aporta innumerables beneficios para nuestra salud gracias a los probióticos que componen el yogur. Este alimento nos ayuda mantener equilibrada la flora intestinal y mejorar la calidad de nuestros huesos, debido al alto porcentaje de calcio. Si quieres saber cómo hacer mousse de yogur en casa, sigue leyendo este artículo de unComo.
Ingredientes:
Pasos a seguir:
Lo primero que debes hacer antes de empezar a preparar el mousse de yogur casero es dejar listos todos los ingredientes. Si quieres saber a cuánto equivale una cucharada de azúcar en gramos, en este artículo te lo contamos. Y si prefieres hacer esta receta aún más ligera, puedes sustituirlo por edulcorante. En el caso de que no tengas nata de montar, puedes reemplazarla por 100g de queso de untar. Prepara varios recipientes para la elaboración.
Cuando tengas todo listo, ya puedes empezar. Lo primero que haremos será mezclar en un bol los yogures con una cucharada de azúcar hasta que este último esté bien disuelto. Recuerda que puedes utilizar el sabor de yogur que más te guste pero, en función del que elijas, deberás reducir la cantidad de azúcar. Las cinco cucharadas están pensadas para usar yogur natural.
Ahora, coge otro bol y bate las claras a punto de nieve, en este artículo te contamos cómo hacerlo. MIentras bates, añade las cucharadas de azúcar que quedan poco a poco. En otro bol aparte, monta la nata. En ambos casos es recomendable que utilices varillas eléctricas o batidora, puesto que manualmente no conseguirás el mismo resultado. Sabrás que la nata está bien montada cuando al retirar las varillas queden picos firmes en la nata.
Ahora solo nos queda mezclar todos los ingredientes. Empieza añadiendo la nata montada al yogur y mézclalo con una espátula haciendo movimientos envolventes. Cuando tengas esto, incorpora las claras de huevo de la misma manera y con mucho cuidado para que no pierda la textura cremosa.
Cuando lo tengas todo mezclado, reparte el mousse de yogur en varios moldes o vasos e introdúcelo en el frigorífico durante cuatro horas como mínimo. Si quieres, puedes añadir en la base del vase un par de cucharadas de miel, de mermelada de fresa, o lo que más te guste y luego el mousse. O del revés, primero el mousse y luego verter una cucharada de salsa de frutos rojos, por ejemplo. Si te ha gustado, te animamos a que visites nuestros artículos sobre cómo hacer mousse de fresa, de limón, de miel o de chocolate blanco.
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