La crema de whisky es un mixto entre crema y alcohol que tiene sus orígenes en Irlanda. Su introducción al mercado se remonta al año 1974. Es ideal para consumir en la sobremesa como digestivo y también en la noche.
La mejor forma de consumir la crema de whisky es sola y acompañada de abundante hielo, aunque hay gente que lo toma puro y sin nada más. Esta bebida alcohólica suele gustar a muchas personas debido a su sabor dulce con más cuerpo que una cerveza y mayor suavidad respecto a un whisky.
Este tipo de bebida es ideal sobre todo en invierno y en el periodo de Navidad. La crema de whisky se puede usar también como ingrediente alcohólico en cócteles como el White Russian.
Es muy sencillo preparar la crema de whisky en casa, el proceso de preparación no requiere más que unos pocos minutos, por eso en unComo.com te explicamos cómo hacer crema de whisky casera.
El primer paso consiste en colocar el whisky en una licuadora y luego echar la lata de leche condensada en su totalidad. Una vez hecho este paso hay que añadir toda la leche evaporada en la licuadora para que los dos líquidos empiecen a mezclar bien entre ellos y tengan cierta consistencia.
En un recipiente aparte, que puede ser una taza, hay que mezclar una cucharada de café y 5 cucharadas de agua hasta que queden fusionadas en un solo liquido. Si se quiere saltar este paso, se puede simplemente colocar un chorrito de crema de café, lo importante es dar el sabor adecuado.
Tras haber conseguido una buena mezcla de café hay que colocarla toda en la licuadora junto a los demás ingredientes. Para que todos los ingredientes vayan mezclándose bien se puede usar alguna cuchara de madera. Si se quiere se puede añadir una pizca de canela.
Tras haber finalizado la preparación hay que dejar que el conjunto se enfríe unas cuantas horas en la nevera, para que vaya adquiriendo la textura y la temperatura adecuada. Una vez fría al punto justo es posible, finalmente, servir la bebida.
El último paso consiste en echar la cucharadita de esencia de vainilla en la licuadora. Una vez que tenemos todos los ingredientes en la licuadora hay que encender esta por aproximadamente un segundo, hasta lograr que todos los ingredientes se unifiquen en una sola mezcla de color crema. Este será el indicativo de que la bebida está lista.
La crema de whisky casera se suele consumir con abundante hielo picado, que se coloca en una copa antes de servir la bebida. Este combinado es ideal por su gusto dulce y cremoso y el sabor suave y delicioso que generan la vainilla y el café.
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- Servir fría
- Servir en un vaso de cristal bajo y ancho