Cómo hacer churros sin churrera

Cómo hacer churros sin churrera

¿A quién no se le ha antojado, en un día de invierno o una tarde lluviosa, unos sabrosos churros con chocolate caliente? Es un aperitivo crujiente que se puede comer solo, relleno o untado y que, gracias a su gusto casi neutro, combina gran variedad de sabores: nutella, chocolate, siropes, dulce de leche, dulce de guayaba, queso crema, crema pastelera, etc. Por eso, ¡nunca te dejan mal y hay churros para todos los gustos!

¿Alguna vez has querido prepararlos en casa, pero no tienes una churrera para hacerlos? Pues, si no sabes cómo resolverlo, en unCOMO nos ponemos el mandil contigo para aprender cómo hacer churros sin churrera. Sigue leyendo y descubre el arte de preparar churros caseros con todos los trucos que harán la diferencia.

4 comensales 30 minutos Dificultad baja
Ingredientes:
  • Ingredientes para la masa
  • Ingredientes para decorar
Pasos a seguir:
1

Hierve agua en una cazuela. Debe estar casi en su punto de hervor. Añádele la sal y el aceite. Debe ser justo en ese momento, pues si el agua se pasa de cocción, se evapora, y cambian las proporciones de la receta.

2

Incorpórale la harina justo cuando comience a hervir. Vuélcala de golpe. Remueve con una cuchara de madera (mejor aún con un palo). Cocina a temperatura media.

3

Nunca dejes de remover hasta conseguir que la masa de los churros se despegue. Esta debe desprenderse de las paredes y juntarse en el centro hasta convertirse en una bola lisa y sin grumos (no debe quedar ningún rastro de harina). Todo el proceso te tomará aproximadamente 1-2 minutos. Pasado ese tiempo, retírala del fuego y, si es necesario, sigue mezclando hasta lograr la bola.

4

Deposita la masa en la encimera. Deja que se enfríe un poco para facilitar su manipulación, pero no la dejes enfriar por completo, ya que se pone dura. La temperatura ideal es tibia, casi caliente. Si piensas trabajarla con máquina, ponla directo sin ningún reposo.

5

Trabaja la masa muy bien hasta que quede lisa. Si la trabajas a mano, puedes hacerlo a intervalos, es decir, amasa, descansa, y amasa de nuevo. De esta manera, no te quemarás.

6

Incorpora la masa en una manga pastelera. Usa una boquilla de estrella (que no sea ni muy ancha, ni muy estrecha). Después, coloca la manga pastelera abierta en un vaso, es decir, con los bordes doblados hacia afuera. Agrega la masa con una paleta o cuchara. Por último, cierra la manga dándole un giro de torniquete en la parte sin rellenar. Al hacer el giro, procura que toda la masa se compacte lo más posible, no deben quedar lugares irregulares o vacíos para evitar aire en la masa. Recuerda, la masa debe seguir caliente.

7

Forma varios churros muy largos y córtalos por partes. Hazlo sobre un mantel o una tela semejante. Después, divídelos en cilindros de 13 cm cortados con tijera. Una vez divididas las piezas, puedes dejarles esa forma, o unir una punta con la otra hasta crear el tradicional lazo de los churros españoles. Esta última alternativa resulta más aconsejable, pues te facilita la manipulación de los churros al freírlos.

8

Prepara una sartén con suficiente aceite. También puedes utilizar una freidora o un caldero. Ten cerca siempre una tapa.

9

Comprueba que el aceite está caliente pero no humeante. Pasado 30 segundos o 1 minuto, verás pequeñas burbujas en el aceite, ese será el momento preciso para comprobar si el aceite está listo. Para esto, usa un trozo pequeño de masa o el churro más feo. Si el aceite está en su punto, apenas tenga contacto con el churro, empezará a freírse (burbujeará mucho). Recuerda, si el aceite está muy frío, los churros no se doran bien. Por el contrario, si está excesivamente caliente, los churros que contengan aire explotarán.

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Deposita los churros en la sartén y fríelos 1-2 minutos o hasta que se vean dorados. Mientras, puedes moverlos un poco usando una espumadera o pinza para ayudarlos a dorase parejo. Debes tener mucho cuidado al introducir los churros y durante el tiempo de cocción, pues a veces explotan porque les queda aire dentro de la masa.

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Puedes retirar los churros con una pinza o con la misma espumadera. Ponlos sobre un plato, previamente cubierto con 2 capas de papel absorbente, para eliminar el exceso de aceite.

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Pásalos por azúcar mientras continúan calientes (opcional). Hazlo, poco después de ponerlos en el papel absorbente. Así, el azúcar se les adherirá mejor. Una sugerencia, puedes reemplazar el azúcar granuloso por azúcar glass, ya que les da un toque especial. En este caso, espera a que se enfríen. También puedes combinar azúcar granulada con canela.

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Sírvelos. Puedes acompañar tus churros sin churrera con chocolate caliente o comerlos con algún sirope.

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Aunque preparar churros parezca una labor inofensiva, si no tomamos ciertas previsiones, puede convertirse en algo peligroso. Por esta razón, a continuación te sugerimos algunos consejos para evitar que los churros exploten durante la cocción.

  • El secreto para que los churros no exploten es sacar el aire de la masa. Esto lo debes hacer en dos etapas: mientras trabajas la masa y al crear el churro.
  • Trabaja la masa muy bien sobre la encimera. Hazlo hasta conseguir una textura suave, homogénea y lisa.
  • Ejerce suficiente presión al incorporar la masa en el utensilio que da forma al churro. Si utilizas el utensilio correcto, podrás sacar cualquier aire restante después del amasado. Los ideales para esta función son las churreras, incluso las más sencillas.
  • La manga no es la mejor opción. En este utensilio, no podemos ejercer toda la presión necesaria para sacar el aire. Por esta razón, siempre existe el riesgo de que los churros exploten. Sin embargo, si tomas en cuenta nuestras sugerencias, disminuyes el riesgo. De cualquier modo, la manga resulta perfecta para preparar churros al horno sin ningún peligro.
  • Calienta bien el aceite, pero no demasiado. Así, si existe algún churro con aire, se abrirá sin explotar.
  • Nunca te pongas de frente a la sartén, trabaja de lado. Así, tendrás tiempo de retirarte si salta el aceite. Además, ten una tapa siempre cerca.
  • Nunca le des forma a los churros usando tus manos. Esta es la peor forma para hacer churros sin churrera, y la más peligrosa. En la mayoría de los casos queda aire en la masa.
  • Haz los churros sin churrera al horno. Esta técnica de cocción resulta ideal para hacer churros sin churrera, pues resulta la opción más segura. Además, el resultado es muy bueno y más ligero. Si te gusta esta idea, busca una receta para horno (casi siempre incluyen huevo, leche y manteca).
  • Coloca los churros sobre un mantel o una tela semejante. De esta manera, lo churros no sudan y no explotan al freírlos.

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Consejos
  • Los churros clásicos usan agua, si los quieres más cremosos ponles leche.
  • La masa del churro es una masa de doble cocción, semejante a la masa choux.
  • Puedes rellenar los churros después de fritos, abriéndoles un hoyo con una brocheta y rellenándolos con una manga.
  • Existen boquillas muy finas y largas, especiales para rellenar churros.
  • Mantén a los niños fuera de la cocina mientras prepares churros fritos.