Las semillas de chía constituyen una de las mayores fuentes nutritivas, con un alto contenido en ácidos grasos omega 3, calcio, magnesio, hierro, fósforo y vitaminas, entre otros nutrientes y proteínas. Todos ellos, aportan múltiples propiedades medicinales y alimentarias muy benficiosas para nuestro organismo. Una de las formas más sencillas de consumirlas es elaborando agua de chía o chía fresca. El procedimiento es muy sencillo, sigue leyendo este artículo de unComo y descubre los pasos para saber cómo hacer agua de chía.
Lo primero que vamos a hacer es poner las semillas de chía a remojo. Para ello, introduce la chía en un recipiente y cúbrela con agua. Evidentemente en este paso no gastaremos el litro entero de agua, solo lo necesario para tapar todas las semillas, el resto resérvalo para más adelante. Tendrás que dejarlas en remojo una hora para que reblandezcan y crezcan.
Mientras tanto, coge otro recipiente y vierte el agua que sobró del paso anterior. Además, agrega el zumo de los limones y mezcla bien ambos ingredientes. Si no tienes limón, puedes utilizar zumo de lima, el resultado será muy similar.
Cuando hayas mezclado el zumo con el agua, agrega el edulcorante y remuévelo bien. Puedes escoger el que más te guste (azúcar, miel de abeja, etc.) pero debes saber que el más utilizado para preparar la chía fresca es la miel de agave. Sin embargo, no todos acostumbran a utilizar este tipo de edulcorante y, por ello, puedes usar el que tengas en casa.
Cuando haya pasado el tiempo de remojo de las semillas, agrega la chía al otro recipiente donde tienes el resto de ingredientes, no será necesario colarla porque, como verás, se habrá formado un gel. Mézclalo todo bien y deja que repose durante 10 minutos. Puedes dejarlo a temperatura ambiente o introducirlo en el frigorífico, en función de si quieres que el agua esté fresca o natural.
Pasado el tiempo de reposo, ya lo puedes servir en vasos y, si lo deseas, introducir cubitos de hielo para que esté bien fría y decorar con una rodaja de limón o lima. Es mejor que no cueles el agua y la bebas con las semillas para conservar todas sus propiedades y aprovecharte de ellas. Como ves, preparar agua de chía es muy sencillo y te aportará toda la cantidad de nutrientes que tu cuerpo necesita. También puedes ver nuestros artículos sobre cómo hacer agua de avena y cómo hacer agua de arroz.
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